Gaspar Martins Pereira y Amândio Morais Barros. “El vino de Porto y la Región del Douro en la Época Moderna” PT

En este trabajo se analiza la dinámica del vino de Oporto en la Edad Moderna. Se explica que la creación del vino de Oporto es resultado de un largo y persistente proceso de implantación de la vid en un territorio donde los hombres se aprovecharon de las condiciones naturales favorables para la fabricación de un vino único. En la primera sección, el artículo habla de la relación entre el vino y su implantación en el territorio; se demuestra que el vino de Oporto solamente se puede identificar con la región del Duero en el siglo XVIII, aunque la fase exploratoria empezó en un tiempo tan temprano como la Edad Media. A continuación se estudian los orígenes históricos del crecimiento del vino en la región mediante la presentación de textos de los cronistas medievales y modernos, además de documentos de archivo que prueban que partes del territorio, como la región alrededor de Lamego, se encontraban ya profundamente involucradas en la comercialización de vinos de calidad (de “vinos viejos y aromáticos”) a nivel internacional. La tercera sección desarrolla la conexión entre la tierra y la producción de vino, tema que remite para el papel de la Compañía Monopolística fundada por Pombal en 1756 en la protección de la calidad del vino de Oporto por un innovador proceso de demarcación que permitió que la región del Duero fuera la primera región vinícola demarcada y reglamentada en el mundo. En la cuarta parte se estudia la aparición histórica del Duero / vino de Oporto en relación a la actuación de las élites locales en la creación de una marca; en el caso del Vino de Oporto queda claro que la producción de vino (y el reconocimiento de la marca Porto/Port Wine) fue el resultado de una estrategia económica diseñada a principios de la Edad Media por los conventos cistercienses en la región, que fue seguido por las elites comerciales de Oporto que dominaron la distribución de vinos. Desde este punto de vista, es interesante analizar el proceso por el que algunos de los propietarios de “granjas de vino” intentaron (y en muchos casos lograron) conseguir el estatuto de “vecinos de Oporto”, logrando privilegios comerciales. En la siguiente y última sección se desarrolla el análisis de los exportadores, comerciantes, nobleza (y nobles-comerciantes) y monasterios, la apuesta que depositaron en las exportaciones de vino hacia Inglaterra y, más tarde, la aparición de accionistas de la Compañía, la élite del vino que logró transformar los negocios locales en una amplia y significativa empresa.